Creo que es justo, agradecer y devolver aquello que se recibe y te hace bien.
Al fin y al cabo, lo que proyectas es lo que recibes, pero no puedes quedártelo para ti, sino se rompería la magia.
Gracias a todos aquellos con los que dí los primeros pasos en el coaching, aquellos de los que aprendí y sigo aprendiendo, cada día,… profesores, compañeros, profesionales y expertos en distintas materias.
Gracias a la primera persona que, a pesar de no tener experiencia, confió en mí para que le ayudara a conseguir sus objetivos… (al principio fue duro, pero con trabajo, salimos victoriosos).
Gracias, por supuesto, a aquellos que no confiaron e incluso se sinceraron, detectando todas mis áreas de mejora y diciéndome lo que no les gustaba y lo que tenía que mejorar.
Gracias, a los que me ayudaron a hacer la página, a preparar cursos, talleres y que han aportado su granito de arena, sobretodo paciencia, para ayudarme con todo esto.
Gracias infinitas a las pocas o únicas personas que estuvieron en los inicios, momentos de mucho esfuerzo, muchas horas de estudio y mucho sacrificio, fines de semana, días festivos, vacaciones, noches… siempre apoyando, comprendiendo, aportando y colaborando.
Y gracias, a todos aquellos, que seguirán sin gustarle lo que hago y aquellos que se apuntan sólo a los buenos resultados cuando los hay, porque también son una parte importante, de todo esto.
En definitiva, gracias infinitas a todos los que habéis hecho posible este proyecto, en el que tú eres lo importante.
CBC (Coaching Salamanca)